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Ciudad Acuña, Coahuila, México | 05 de Noviembre del 2024

Recibe Acuña replica del estandarte de Don Miguel Hidalgo y Costilla

Que utilizó el padre de la patria en la lucha por la independencia de México

Ciudad Acuña, Coah. 15 de septiembre del 2010. Ciudad Acuña recibió hoy una replica en serigrafía del estandarte que utilizó el padre de la patria Don Miguel y Hidalgo y Costilla en su lucha por la independencia de Las Américas ( México), que inició el 15 de septiembre del año 1810.

Inocencio Aguirre Willars, Javier Navaro Galindo y Cuauhtémoc Arzola, representantes del gobernador Humberto Moreira hicieron entrega de este estandarte que será expuesto en el mezzanine de la presidencia municipal, en donde lo puedan admirar todos los que visiten este edificio.

El alcalde de Acuña Alberto Aguirre acompañado de su esposa Marilu Flores de Aguirre, el secretario del ayuntamiento Martín Faz Ríos y el primer Regidor Marcos Villareal Suday, así como un representante de la guarnición miliar de la plaza, recibió este estandarte que obsequió al municipio el gobernador Humberto Moreira.

El licenciado Aguirre Willars leyó el siguiente mensaje:

Bandera de Libertad

La mañana del 16 de septiembre de 1810, don Miguel Hidalgo y Costilla y sus seguidores, alrededor de seiscientos hombres, los más, armados sólo de lanzas y hondas, partieron rumbo a San Miguel el Grande (hoy de Allende). Horas antes, el cura de Dolores, Guanajuato, había convocado al pueblo a luchar contra el mal gobierno de la Nueva España y a favor del rey Fernando VII, entonces preso por Napoleón Bonaparte.

Al salir de la iglesia parroquial, don Miguel Hidalgo arengó a la multitud que lo rodeaba:

“¡Hijos Míos! ¡Únanse conmigo! ¡Ayúdenme a defender a la patria! ¡Los gachupines quieren entregarla a los franceses! ¡Se acabó la opresión! ¡Se acabaron los tributos!”.

La muchedumbre hizo alto en la hacienda de la Erre, cercana a Dolores. Alrededor de las dos de la tarde. Hidalgo ordenó continuar la marcha. Atardecía cuando se detuvieron en el Santuario de Atotonilco.

Luego de merendar, Hidalgo se dirigió a la sacristía y tomó un estandarte de la Virgen de Guadalupe, convirtiéndolo en la primera bandera del movimiento. A partir de allí, el grito de “¡Viva la Virgen de Guadalupe!” resonaría de manera incesante durante la guerra.

El histórico estandarte en el Museo Nacional de Historia del Castillo de Chapultepec, fue el símbolo de la nación que empezó a gestarse en las escalinatas de la parroquia de Dolores. Después de 300 años de dependencia colonial. Hidalgo y los suyos veían en la Virgen de Guadalupe no sólo la imagen que inflamaba la fe del pueblo, también seña de identidad. Los criollos, castas, indios y negros novohispanos de principios del siglo XIX encontraron en la guadalupana un signo de pertenencia que los unía, incluso más allá de la devoción religiosa.

Aunque el estandarte de Atotonilco no fue la única bandera utilizada durante la Guerra de Independencia, la imagen de la Virgen de Guadalupe acompañó a aquellos hombres deseosos de libertad.

Con el interés de que esta imagen que alguna vez sostuvieron las manos del Padre Hidalgo sea representativa de la unidad de los mexicanos, el Gobierno del Estado, que me honro en presidir, lo difunde y, al hacerlo rinde homenaje a los insurgentes mexicanos que lucharon por nuestra libertad, en especial a los luchadores Coahuilenses, como Miguel Ramos Arizpe y Melchor Múzquiz que con sus armas y sus ideas forjaron el México de hoy.

Prof. Humberto Moreira Valdés
Gobernador Constitucional del estado de Coahuila de Zaragoza A 15 de septiembre del 2010

Etiquetas: Acuña, don Miguel Hidalgo, estandarte, independencia, Virgen de Guadalupe


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