Perdimos a un gran coahuilense: Rubén Moreira Valdez
- 9 de Enero de 2016
- Por: Roderic Gómez
Ciudad Acuña, Coahuila de Zaragoza. 09 de enero de 2016.- El Gobernador Rubén Moreira Valdez asistió en esta ciudad a los funerales del empresario Jesús María Ramón Valdez, acaecido el pasado 07 de enero a la edad de 77 años.
“Hoy perdimos a un gran coahuilense, y México perdió a un gran hijo”, expresó el Mandatario Estatal al dar sus condolencias a familiares y amigos, y decenas de personas reunidas en el edificio Casa Madero.
Luego de realizar una de las guardias de honor, Rubén Moreira Valdez comentó que no se puede entender el desarrollo económico de nuestro estado sin la figura de Jesús María Ramón, sin lo que él significa.
“Porque no solamente impulsó una industria, sino empujó en el estado la experiencia parquera, la experiencia de la industria del hospedaje industrial”, resaltó el gobernador al destacar la visión de Jesús María Ramón.
El Gobernador recalcó que muchísimos coahuilenses hoy tienen un empleo porque Jesús María tuvo la visión de detonar la industria parquera en Coahuila.
Asimismo, ejemplificó su calidad humana y su amor por esta región y por Coahuila, al recordar que el nombre de su empresa “Amistad”, es el mismo nombre que lleva la presa, “por lo tanto uno distingue dónde está la raíz de esa iniciativa que es tan importante para nuestro estado”, enfatizó.
Mencionó que la clase política del país reconoce en Jesús María Ramón a un gran mexicano, de esos que le hacen mucha falta al país; pero también, por fortuna, de esos que existen y que han creado muchas cosas buenas en esta gran nación.
“Nosotros, en el Gobierno del Estado, reconocemos a un gran coahuilense y por mi conducto, el Gobierno de Coahuila extiende sus condolencias a familiares y amigos de esta gran persona que fue Jesús María Ramón”, mencionó el Gobernador del Estado.
Por la tarde asistió a la misa de cuerpo presente, que se celebró en el templo de Nuestra Señora de Guadalupe.
Etiquetas: Coahuila, funeral, guardia de honor, Jesús María Ramón, luto, Rubén Moreira
