EPN sostiene encuentro con los oaxaqueños
Oaxaca, Oaxaca. Muchas gracias, Oaxaca. Gracias por estar aquí. A sus bellas mujeres, a sus jóvenes y a sus hombres, gracias. Verdaderamente estoy muy emocionado de estar aquí en Oaxaca, de poder tener este gran encuentro con la gente que hoy se reúne en representación de la sociedad oaxaqueña.
Hoy inicié mi recorrido por este estado. Di el primer paso en esta tierra. Y celebro haberlo hecho allá en la tierra de Juárez, en San Pablo Guelatao. Ahí estuve hoy por la mañana.
En mi primer punto que visito de Oaxaca, justamente para tomar de ahí la inspiración de un gran hombre de México, en Juárez, quien luchó contra la adversidad, y quien es en nuestros días ejemplo de un hombre que quiso imponer el imperio de la ley y de la justicia para el pueblo de México.
En él nos inspiramos, y él es aquí hoy guía en esta visita a Oaxaca, a su tierra.
¡Qué viva Juárez!
Después de haber estado ahí, después de haber visitado hoy Guelatao por la mañana, de haber montado una guardia de honor justamente en su pueblo natal, vengo a la capital de Oaxaca.
Vengo aquí a esta gran y bella ciudad, que lo es por la majestuosidad de su arquitectura, pero muy especialmente por su gente, por la gente que amablemente hoy me ha recibido, con una gran calidez, con una gran simpatía.
Gracias a Oaxaca.
Gracias por estas muestras de cariño y de afecto, pero, sobre todo, de respaldo a un proyecto que encabezamos: el proyecto que todo México quiere, el proyecto de un cambio con rumbo para mejorar las condiciones de México.
Celebro en este encuentro la presencia muy señalada de las mujeres de distintas regiones de Oaxaca; de nuestros jóvenes, que están aquí cobrando fuerza y marcando justamente el cambio para México, para abrir oportunidades para nuestra juventud.
Gracias jóvenes de Oaxaca.
Y a los hombres de esta tierra, que trabajan todos los días para procurar llevar sustento a sus hogares, para procurar bienestar para sus familias: gracias, porque es justamente este contacto con la gente el que nutre, el que alimenta la mística de la campaña que vengo realizando por todo México.
La campaña se distingue por ese contacto con la gente. Porque es ahí donde uno encuentra justamente, además de la fuente de energía, el por qué del trabajo y el proyecto que estoy encabezando. Porque México quiere estar mejor y puede estar mejor. Porque México quiere condiciones mejores para sus mujeres, para que las madres de familia puedan estar tranquilas al saber que sus hijos tienen horizontes de un buen porvenir, pero que también tienen horizontes para encontrar oportunidades para su desarrollo.
Y muy importante hoy en día: a las mujeres les ocupa y les preocupa que haya condiciones de seguridad para ellas y para sus hijos.
Por eso, vamos a cambiar a México.
Oaxaca nos da la bienvenida con esta lluvia, que más nos motiva, que más nos llena de entusiasmo y de energía para este recorrido que vamos haciendo por todo el país.
Ya lo señalo y vuelvo a reiterar: lo que va a marcar esta campaña es justamente una de compromisos. Una que responda a las necesidades e inquietudes que tienen los mexicanos.
Dejemos que nuestros adversarios se ocupen de nosotros. Pareciera que no tuvieran más discurso y más propuesta, que hablar y ocuparse de la campaña que el PRI viene haciendo.
A nosotros no nos van a distraer ni las provocaciones, ni las señales de desesperación que tienen los adversarios. Me voy a ocupar, como lo vengo haciendo, de encontrarme con los mexicanos y de llevarles el compromiso que voy a hacer para que México tenga mejores condiciones, porque queremos y porque sí se puede.
Que quede claro: México va a cambiar.
Voy rápidamente, porque ya nos llovió, pero así queremos estar: empapados y mojados en este calor humano, que el pueblo de Oaxaca nos ofrece.
Vengo haciendo compromisos que hoy aquí nuevamente comparto con ustedes, porque tiene que ver no sólo con el compromiso que hice donde lo ofrecí, sino que fueron compromisos hechos para todo México.
Me comprometí a que vamos a trabajar por una mejor educación para nuestros hijos. Y que en ese propósito lo primero que he comprometido es un programa nacional para rehabilitar las escuelas de nuestro país, para que existan espacios dignos, decorosos, y ahí nuestros hijos reciban la educación de calidad que merecen.
Me he comprometido a trabajar para lograr que México crezca económicamente. México se ha rezagado y tiene un muy bajo desempeño económico, peor que el que otras naciones de América Latina hoy han observado y han experimentado.
Por eso me he comprometido a tres veces multiplicar el crecimiento económico que hasta ahora hemos tenido, para lograr algo muy importante que vengo hoy a comprometer: empleo y trabajo de calidad para todos los mexicanos.
Ese es mi compromiso para todo México, desde Oaxaca.
Y he comprometido también corregir la estrategia para combatir la inseguridad que hasta ahora se ha seguido. Son muchas las voces que en todo México quieren ser escuchadas, porque se dan cuenta que la estrategia no ha dado los resultados esperados.
Si bien es de recoger lo que bien ha servido, también es de mejorar lo que no se ha traducido en los resultados que la sociedad espera.
Reajustaré la estrategia seguida contra el crimen organizado, para ofrecerle a los mexicanos paz, seguridad, orden y, sobre todo, libertad al pueblo de México.
Desde aquí recuerdo también el compromiso que he hecho para combatir uno de los temas que más lastiman la convivencia de la sociedad mexicana. No podemos seguir siendo un país de pobreza cuando estamos en pleno siglo XXI.
Oaxaca, Chiapas y el sureste mexicano no pueden quedarse rezagados ante el desarrollo que México debe tener. Vamos a potenciar, vamos a impulsar y a promover las vocaciones económicas de cada región del país, porque todo México, todo el país, todos sus estados, merecen tener desarrollo y progreso.
Ese es mi compromiso específico para con Oaxaca. Trabajaré incansablemente para que Oaxaca tenga desarrollo, progreso y condiciones mejores para todos los oaxaqueños.
Y algo que es fundamental: la salud de nuestro pueblo. Tenemos que asegurarnos que la salud realmente llegue a todos los mexicanos.
Es cierto, ha habido un instrumento que hoy llega y beneficia a muchos mexicanos, pero a uno de cada tres mexicanos este beneficio, en términos reales, no ha llegado. Porque podrán ser parte de un padrón de beneficiarios, podrán tener, como ocurre en Oaxaca, un hospital o varios hospitales, que ahí están, pero ustedes saben muy bien de lo que carecen, no tienen médicos, no tienen el debido equipamiento y, en pocas palabras, no están funcionando o no están operando.
Eso se acabó. Y por eso vengo a hacer hoy un compromiso aquí, el primero que hago específicamente para Oaxaca, de los otros que habré de hacer sobre infraestructura carretera y sobre infraestructura para el desarrollo en mis próximas visitas a Oaxaca, para mejorar las condiciones de Oaxaca.
Pero aquí hoy quiero firmar un compromiso con ustedes. Quiero firmar el compromiso que nos permita consolidar realmente la operación de una red de hospitales para Oaxaca. Vamos a hacer realidad la operación plena y consolidada de hospitales en Oaxaca.
Ese es mi compromiso, por la salud de los oaxaqueños.
Vamos, como aquí me lo fueron diciendo. Recogí a mi paso varias expresiones, especialmente de las mujeres, que en mucho coincide con lo que aquí estoy comprometiendo.
Me pidieron y habrá allá afuera alguien que pueda decir: yo se lo dije me pidieron paz. “Queremos paz para Oaxaca”; “queremos seguridad”; “queremos salud”. Pero, sobre todo, queremos empleos dignos y apoyo al campo, que tanto lo necesita.
Ayer en mi tierra, en el Estado de México, hice un compromiso para toda la nación: ocuparme de reactivar realmente la atención y, sobre todo, hacer que el campo de México sea un campo productivo, que genere oportunidades y, sobre todo, sea fuente de vida digna para las familias que del campo viven. Ese es mi compromiso, que aquí reitero en Oaxaca.
Amigas y amigos de Oaxaca:
Es esta mi primera visita de las varias más que espero hacer a Oaxaca. Y créanme que hoy solamente les quiero pedir a quienes están aquí, a quienes tengo de frente y a quienes tengo en mis espaldas, que son un gran número: por eso estos brincos por aquí y por allá, con el propósito de poderle saludar a la gente que está en la parte de atrás.
Una gran concentración, que a final de cuentas son expresión muy señalada, muy motivada y muy entusiasta de lo que queremos hacer por México: construir, entre todos, el cambio que México quiere.
Y aquí se alza la voz del cambio, para que desde Oaxaca construyamos el camino del cambio para México.
Voy a hacer camino por todo México, pero desde aquí, desde Oaxaca, hoy le decimos a México, que mi partido, y que con el apoyo mayoritario de ustedes, voy a llegar, seguro estoy, a la Presidencia de la República.
Vamos a trabajar unidos, vamos a trabajar entre todos para que no dejemos la gran oportunidad que tenemos de construir el cambio para México.
Ha llegado el momento. No podemos esperar más. Es la gran oportunidad.
Por eso les pido a los presentes que nos multipliquemos en este esfuerzo; que sean ustedes la voz que vaya por todo Oaxaca, con sus familiares, con sus amigos, con quienes están cerca de ustedes, para decirles que ha llegado la hora de hacer el cambio para México; que México merece estar mejor y que depende de nosotros lograr el cambio para que México esté mejor.
Les pido su trabajo, su esfuerzo, sus brazos, sus voces, para hacer el cambio que México necesita. Vamos.
Déjenme ser, con su confianza, con su apoyo, el Presidente de México, que quiero servirle a todos los mexicanos y particularmente quiero servirle, como aquí hoy lo digo, a todo Oaxaca y a los oaxaqueños.
Aquí están nuestros candidatos, espléndidos candidatas y candidatos, quienes nos representan en este proceso y quienes van por su confianza para poderles representar en el Congreso de la Unión.
Les pido su apoyo y su voto de confianza para el partido, para nuestros candidatos, para su amigo, para quien quiere ser siempre el amigo de Oaxaca.
Y, sobre todo, que hoy le quiero pedir aquí a Oaxaca que me adopten como un hijo de Oaxaca. Quiero que Oaxaca, con su apoyo, tenga un hijo adoptivo que sea Presidente de México.
¡Vamos por la victoria el próximo primero de julio!
¡Qué viva Oaxaca! ¡Qué viva México!
¡Vamos a ganar el primero de julio! ¡Vamos por la victoria!
¡Qué viva México!
(Se procede a la firma de Compromiso.)
Amigas y amigos:
El compromiso que se suma a los compromisos nacionales que ya he venido firmando y que habrán de beneficiar a todo Oaxaca, y que aquí ya señalé algunos de ellos que están dirigidos a combatir pobreza, generar seguridad y crecimiento económico, hoy firmo aquí un primer compromiso particular para Oaxaca, que es la consolidación de la operación de la red hospitalaria de Oaxaca.
Queremos hospitales, pero los queremos funcionando y operando. Más médicos, mejor equipamiento para la salud de todos los oaxaqueños. Mi compromiso, que mañana habré de cumplir.
Muchas gracias.
Etiquetas: campaña, EPN, Oaxaca, PRI
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