Los últimos diez años han sido desastrosos para México
El futuro puede ser mejor a partir del 2012
- 28 de Abril de 2010
- Por: Ramiro Gómez
A nuestra generación la ha tocado vivir una etapa convulsionada, las crisis de los ochenta, la aparición y divulgación del internet, la caída del muro de Berlín, la llamada derrota de los extremismos, la llegada del siglo XXI, con todas las expectativas y miedos que esto significó.
En México vivimos la histórica derrota del Partido Revolucionario Institucional, en el año 2000, después de 7 décadas de Hegemonía Política. Los vientos de cambio del inicio de milenio nos contagiaron a todos y por momentos vivimos la esperanza de que todo seria mejor, y diferente, por desgracia todo ha sido diferente, pero peor.
Los últimos diez años han sido desastrosos para nuestro país. Perdimos el liderazgo latinoamericano. Bajamos en la escala de la competitividad global. La diplomacia degeneró. Perdimos la estabilidad social y la cohesión.
La inseguridad y el crimen se desbordaron. Creció el desempleo La autoestima nacional se derrumbó. La esperanza que los nuevos tiempos ofrecían se transformó en desesperanza y frustración.
Sin embargo, hay fenómenos que nadie detiene, las nuevas tecnologías de la información, el internet y las redes sociales han aparecido y trastocado una parte esencial en la sociedad global, han modificado nuestra forma de comunicarnos, y eso hace una gran diferencia y atrae nuevas oportunidades.
Los gobiernos, las instituciones religiosas y educativas han perdido una fuente importante de su poder, ya no controlan toda la información, la censura es cada vez más complicada, y eso cambia cualquier correlación entre instituciones e individuos.
Ahora todos podemos informarnos de todo, basta una computadora y una conexión a la red; ahora es cada vez más difícil guardar secretos, aun de la vida privada.
Esta velocidad de intercambio de información y su difusión viral, han ocasionado que los responsables de la administración pública tengan que ser mucho más cuidadosos de su desempeño.
Ya no basta pagar millones de pesos en pautas publicitarias para crear o modificar las percepciones acerca de su labor al frente de los gobiernos.
Hoy, las nuevas tecnología y las redes sociales están logrado lo que hasta ahora ha sido una aspiración insatisfecha: ver y saber lo que hacen nuestros representantes, honrar o criticar sus obras o sus dichos, unirse a sus propósitos o descalificarlos, formar corrientes de opinión o movimientos con plena independencia y a costos mínimos.
La multiplicación de las ideas, que antes era impagable hoy se convierte en un ejercicio cotidiano. Los grandes emporios de comunicación electrónica y escritos, no han podido sustraerse a esta vorágine y han inteligentemente adoptado sus ventajas, la gente común hoy es fuente de información para los medios masivos. La credibilidad del ciudadano común que con su dispositivo móvil, toma la imagen del momento y en tiempo real la sube a la red es indiscutible. En este contexto surge el movimiento 2012.
Es el momento de aprovechar las ventajas de estas nuevas formas de comunicación y de intercambio de ideas para tomar el futuro en nuestras manos. Que queremos hacer? Compartir ideas respecto de la situación por la que atraviesa nuestro país para generar una corriente de cambio en positivo.
Con quienes lo queremos hacer? Con todos los que aún conservemos la esperanza de que es posible ser mejores si unimos nuestras voces y generamos una gran organización que opine, proponga e influya.
Como lo queremos hacer? En primer lugar, buscando liderazgos que cumplan el perfil que requieren las nuevas generaciones. Que sepan entender la modernidad y que estén dispuestos a guiar al país en ese sentido, con capacidad para unir a los mexicanos, que tengan sensibilidad ante la pobreza y un plan para combatirla.
Que por encima de todo entiendan que para progresar tenemos que estar unidos en torno a una idea de nación, que actualmente no se ve. En una palabra, alguien que pueda darle rumbo al país y que tenga la capacidad de guiar la salida del caos, que sea capaz de devolver la esperanza para que podamos a vivir en la amistad y la concordia.
Tenemos a alguien en mente? Si, a Enrique Peña Nieto, un hombre de nuestro tiempo. Que podemos hacer?, Acrecentar nuestra red social para hacerle sentir a Enrique Peña Nieto nuestro apoyo, animarlo a conseguir la candidatura, Organizar nuestras ideas y sugerirlas de manera sistematizada, para ayudar a que se haga realidad el México en el que queremos vivir y con el que nos queremos comprometer.